Columna Visión de Líder
Por Angel Pablo Reyes Santiago
“Al poder le ocurre como al nogal, no deja crecer nada bajo su sombra”. – Antonio Gala
La exhibición de la vida “fifi” que lleva José Manuel López Beltrán, no solo refleja el doble discurso de su papá Andrés Manuel López Obrador, sino que nuevamente se comprueba que para que un sector sea bello en la sociedad, existe otro que hace el trabajo duro, realiza sacrificios… es humillado.
Esta constante de belleza y humillados, se da en el sector privado con la relación patrón-obrero y en el sector público, con el contrato social de gobierno-gobernantes; para que alguien reciba y goce de la belleza, otro tiene que ser humillado.
Lo aceptemos o no es una realidad, y quien siga engañado con el discurso de “austeridad republicana” es porque desconoce o le gusta seguir humillado.
Por poner un ejemplo, al gobierno actual y en especial al Presidente de México no le interesa ni le conviene una distribución más equitativa de la recaudación federal.
Si tuviera voluntad, ya hubiera modificado la Ley de Coordinación Fiscal que crea “El Fondo General de Participaciones” para los estados y municipios, con el 20% de la recaudación federal (Art. 2 LCF), misma que es de “casi todos” los impuestos, porque se excluyen 10 contribuciones como “El impuesto sobre automóviles nuevos” (Art. 2, Párrafo segundo, Fracción V).
Es de decir, de cada peso que recaba la federación, 20 centavos se distribuyen para los 32 estados y los 2 mil 471 municipios que hay en el país, (con exclusión de las 10 contribuciones que se queda íntegras la federación y que las puede distribuir a su criterio como la explotación y extracción de hidrocarburos).
Más del 80% de los impuesto lo administra el Gobierno Federal, tal como se viene realizando desde la década de los 70 cuando se creó esta ley bajo el gobierno priista de José López Portillo, la cual recibió su última reforma el 30 de enero del 2018 donde todavía era mandatario Enrique Peña Nieto (pueden descargar el PDF en el siguiente liga https://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/31_300118.pdf para comprobar).
Actualmente los estados y municipios son los que resuelven las exigencias y solicitudes ciudadanas más inmediatas, en especial este último nivel tiene una carga importante de servicios públicos como agua potable, limpia pública, alumbrado, seguridad, etc., mientras que la federación continúa simulando el “combate a la pobreza” con los programas sociales, política que no es propia de este gobierno, así lo inició Salinas de Gortari en 1988 con el programa Solidaridad.
La solución de una vida mejor esté en la distribución de la riqueza y mientras no se empieze mejorando la distribución de la recaudación de impuestos, los municipios y los estados no podrán generar condiciones para el desarrollo de sus habitantes, seguirán batallando para fortalecer los servicios de limpia, agua potable, alumbrado, la seguridad, etc… seguirán padeciendo las calles y careciendo millones de hogares en nuestro país.
Ya basta del discurso de “austeridad republicana”, necesitamos una verdadera redistribución. Tan solo el fisco obtuvo en el 2021 más de 3 billones 561 mil 81 millones de pesos por ingresos tributarios y menos del 20% se le entregó a los estados y municipios, todo lo demás se lo quedó el Gobierno Federal, para una burocracia y clase política que hace negocios al amparo del poder.
La exhibición de la vida “fifi” que lleva José Manuel López Beltrán “patrocinada” y los negocios que han sido demostrados periodísticamente (como el del cacao), demuestra que AMLO solo tiene el interés por mantener el “estatus quo” de su familia y los grupos del poder que lo han ayudado.
El sacrificio son sus seguidores quienes seguirán humillados, enarbolando una bandera que los utiliza mientras el viejo régimen sigue incrustándose hasta la médula de los gobiernos del movimiento de regeneración nacional.
Debemos tener en cuenta que la llegada de AMLO al escaño presidencial no es producto de la casualidad sino de la causalidad, el apoyo que ha tenido por grupos de poder es evidente, nadie sobrevive 18 años en campaña sin flujo constante de dinero. Hay que recordar que “Al poder le ocurre como al nogal, no deja crecer nada bajo su sombra”. ***
Agradeciendo el favor de su atención, contactaremos próximamente.