Columna Sociedad y Poder
Por Andrés Mora González
Se dice que más sabe el diablo por viejo que por diablo, esto trae a colación, porque el Tribunal Electoral le canceló su candidatura a Presidente Municipal por Veracruz, Puerto, al no cumplir el requisito de residencia, lo que a mi leal entender es una vacilada que bien les resultó.
Es impensable que viejos lobos de mar en la política, hayan descuidado un requisito indispensable para ser elegible, el de cumplir 3 años de residencia en el lugar, y según la constancia le pusieron 2 años 11 meses, expedida por su consanguíneo hermano, Fernando Yunes Márquez.
Si tomamos en cuenta que su padre Miguel Ángel Yunes Linares, fue Diputado muchas veces, Gobernador, y otros tantos cargos públicos más; el Propio Yunes Márquez, ya fue también Diputado Local, 2 veces Presidente Municipal de Boca del Río y candidato a Gobernador, y si le aunamos el hecho de que sus documentos pasan el filtro de su partido el PAN, para su registro ante el OPLE, es imposible esa equivocación.
Maquinada, estudiada, bien perfilada y pactada, con la Cúpula de su Partido, con el solo y firme propósito de perfilar a la candidatura y Presidencia Municipal, a nada menos que su esposa Paty Lobeira.
Los que lo impugnaron mordieron el anzuelo, dudo que la idea sea de tener a una “Juanita” -con mucho respeto a las Damas-, porque como quiera no quedaría Yunes Márquez gobernando, a pesar de su falta de “requisito”, y si le daría todo el respaldo desde la Municipal, donde es semillero de votos, fortalecidos para la Gubernatura que quiere Miguel Ángel Yunes Márquez o el propio padre que solo estuvo de 2 años y sueña con su mandato completo de 6 años.
La idea de colar a su esposa no es, sino, un plan Maquiavélico que les dará resultado, pues el electorado, ve con buenos ojos que una mujer gobierne Veracruz Puerto y conocida como lo es la esposa de Yunes Márquez.
Dudo que esta jugada política electoral, les sea adversa, sólo que al Municipio no le asignarán tantos recursos, en aras de atajarlos, veremos que jugada hace el Gober o el Secretario General del Gobierno del Estado, pues no creo que se queden como chinito “milando”.
Hasta la próxima, Dios mediante.