Desdeña el Gobernador Cuitláhuac García protestas de periodistas

En 25 días han matado a una periodista, apuñalado a otra, una más intimidada por la policía, otra jaloneada por una servidora pública y hermana de la Diputada Federal, en un hecho que agredió a 2 periodistas más.

Por Angel Pablo Reyes

Zona Norte, Ver.- La falta de sensibilidad del Gobernador Cuitláhuac García Jiménez se une al desprecio por la vida humana, la intolerancia política y la corrupción que reinan en la región de Poza Rica-Papantla donde se ha registrado el cobarde homicidio de la periodista María Elena Ferral, el nefasto atentado contra Mireya Ulloa, y agresiones a 4 periodistas más por el ejercicio periodístico en un breve espacio de 25 días.

PEl día de ayer Cuitláhuac García Jiménez minimizó las protestas de compañeros periodistas que se manifestaron en la autopista Totomoxtle exigiendo una reunión con el Ejecutivo Estatal encargado de garantizar la seguridad de los veracruzanos y la prevención de delitos, tarea que durante los 16 meses de su gobierno sigue sin cumplirla.

Y es que desde su llegada al Gobierno del Estado el morenista ha evitado un acercamiento con los periodistas que a diario buscan la información para la sociedad, contrario a ello se ha reunido con maestros, empresarios, abogados, colegios de médicos y otros sectores, pero siempre desdeñando al gremio periodístico.

Además de la justicia para todos los homicidios y agresiones en contra de periodistas, los compañeros manifestaron en protestas entablar una mesa de trabajo para abordar diversas garantías al ejercicio periodístico, pero ni un funcionario de su gabinete llegó al lugar.

Cabe destacar que el Homicidio de María Elena Ferral, se da 25 días después del pasado 5 de Marzo del presente, durante el “Jueves de Puertas Abiertas” dentro del Auditorio Municipal donde un grupo de ciudadanos le “exigían mayor apoyo para el Deporte” al Presidente Municipal de Poza Rica, Francisco Javier Velázquez Vallejo.

En su momento, dichas demandas se subieron de tono ante la falta de respuestas claras de Velázquez Vallejo quien protegió al Director responsable y su suplente Ramo Caro Rosas, por lo que un grupo de periodistas que cubrían la fuente se acercaron a documentar los hechos.

En esos momentos fueron agredidos y obstaculizados en el ejercicio de su profesión por la directora de Comunicación Social, Beatriz Bonilla Herrera, también hermana de la Diputada Federal Raquel Bonilla Herrera quien argumentó que era un “asunto privado”.

De acuerdo con Brenda Espinosa Ruiz, directora de la Revista La Trayectoria, estaba grabando los hechos en disputa cuando la servidora pública municipal, la apretó fuertemente del brazo derecho y con voz altisonante le dijo que “no podía grabar porque era un asunto particular y no público”.

Los otros dos periodistas de nombre Pablo Espidio y José Martín Arriaga, también fueron interpelados y bloqueados por Herrera Bonilla quien no quería que se documentaran las protestas por falta de apoyo al Deporte y por ineptitud del gobierno Municipal.

El otro hecho se dio la madrugada del miércoles 11 de marzo con la periodista Mirella Ulloa Valencia quien fue apuñalada afuera de su casa luego de terminar la edición del diario La Opinión de Poza Rica.

Dicho medio que cuenta ya con la muerte de su Director General y un ataque con arma de fuego a su Jefe de Redacción condenó el tercer artero y directo ataque a cuchilladas en contra de la quien se desempeña como directora editorial.

La tercer caso de agresión a periodistas en este localidad fue con la periodista Tita Serrano Pérez quien acusó a los elemento de la patrulla 228 de la Policía Municipal de agredirla afuera de su domicilio argumentando un “reporte de robo” de un vehículo que coincidía en apariencia con un Tsuro Blanco que es de su propiedad.

En su cuenta de Facebook, Serrano Pérez hizo público los hechos a las 2 horas con 43 del jueves 12 de Marzo; a casi 24 horas de que la Directora Editorial del Periódico La Opinión fuera apuñalada afuera de su domicilio por un sujeto que le dejara amenazas.

Hoy lamentablemente se entierra a una compañera más y mientras múltiples sectores de la sociedad se indignan, el Gobierno de la Cuarta Transformación tendrá que marcar una diferencia con sus predecesores quienes en la última década dejaron sin seguridad, procuración e impartición de justicia a una sociedad veracruzana que exige fincar responsabilidades y reparación de los daños.