Liberan a indígena recluido con violación de derechos humanos

Fernando Moreno, de origen totonaco, fue recluido en el CERESO de Poza Rica en febrero del 2018 sin haber sido informado el motivo de su detención.

Redacción Libertad

Poza Rica, Ver.-  Con la vista nublada por el llanto de alegría Fernando Moreno Santes, originario de la Comunidad de Tlahuanapan, Papantla, salió del Centro de Readaptación Social (CERESO) este jueves 6 de febrero luego de que un juez le otorgara la libertad por violaciones al debido proceso,  a la presunción de inocencia y a los derechos humanos de los pueblos y comunidades indígenas.

Moreno Santes permaneció dos años en prisión, acusado del delito de pederastía luego de que decidiera unir sus vidas con su novia, en su momento menor de edad.

De acuerdo con sus familiares, hace 6 años Fernando salió de la comunidad con su hoy esposa y el papá de ella reportó el hecho ante las autoridades comunitarias, quienes dieron aviso al Ministerio Público.

Sin embargo, poco tiempo después regresaron a vivir en concubinato y empezaron a formar una familia hasta que el pasado 28 de febrero del 2018, ya con hijos y su pareja mayor de edad, fue detenido por Agentes Ministeriales quienes no le informaron el motivo de su aprehensión y aprovechándose de su condición indígena lo obligaron a firmar documentos para reconocer el delito.

Tras un tiempo recluido y sin oportunidad de una digna defensa, la Red Veracruzana Inocentes (RVI) que se dedica apoyar a personas de escasos recursos que atraviesan procesos penales injusto , conoció del caso y se enfocó a trabar en su liberación.

“Ella y yo no nos separamos nunca, pues nos casamos dentro del reclusorio. Nos casamos y ya tenemos dos hijos”, destacó Moreno Santes ante diversos medios de comunicación que cubrieron su liberación.

Por su parte, Tomás Mundo Arriaza, representante de RIV, dijo que Fernando no recibió la debida atención por parte de la Fiscalía, principalmente que fue engañado al firmar un papel del cual él no comprendía, ya que su dialecto no le permitió entender donde su nombre plasmó y el motivo de su detención.

Subrayó que en su momento, el detenido no hablaba bien el español y necesitaba un traductor, por lo que se violó el debido proceso,  la presunción de inocencia y a los derechos humanos de los pueblos y comunidades indígenas.

Agregó que afortunadamente la RVI encontró un Juez sensible al caso y un Ministerio Público adscrito oportuno para lograr la liberación.

Mundo Arriaza agregó que actualmente la RVI estudia 20 casos más, ya que la mayoría de los procesos a indígenas tienen violación a sus derechos humanos.

“La liberación del indígena inocente, son los nuevos aires que soplan en la nueva justicia veracruzana, tanto en el gobierno federal del Presidente Andrés Manuel López Obrador, como en el gobierno estatal de Cuitláhuac García Jiménez, externó. (08/Feb/2020)